lunes, 21 de noviembre de 2016

NO LLEGA EL OTOÑO


Aquí en el sur casi no tenemos primavera ni otoño pasamos del calor al frío casi de golpe. A mí me encanta el otoño así que lo busco desesperadamente por cualquier rincón. La otra mañana salí con la pequeña D a dar un paseo y tuve esa sensación de que lo habíamos encontrado, estaba nublado hacía un poco de aire fresquito, las hojas de los árboles se caían, por un momento pensaba que estábamos en otra ciudad. Menos mal que siempre llevo la cámara encima y pude recoger algún momento. Sabía que al día siguiente volvería a salir el sol y seguramente se acabaría esa sensación por lo que recogimos un montón de hojas de diferentes colores y nos fuimos a casa. Al llegar algunas de esas hojas las incluimos en nuestro centro de mesa que cambiamos en cada estación, ahora lo tenemos lleno de piñas, castañas, hojas secas, y con las más pequeñas nos hicimos un móvil que puse en la habitación de la pequeña, así que cada vez que entro en su habitación recuerdo esa sensación de una mañana de otoño en el sur. Y ahora voy a encender el horno  que es otra de las cosas que más me gusta de esta estación.